Cicloturistas solidarios: reciben y arreglan bicicletas para los niños

Dale otra oportunidad a tu bici nació en Pringles en 2022 con el objetivo de que cada niño y niña del Hogar Convivencial local tenga su vehículo personalizado.

Dale otra oportunidad a tu bici es un proyecto llevado a cabo por un grupo de Cicloturistas solidarios de Coronel Pringles que tiene el objetivo de darle a los niños y niñas del Hogar Convivencial su propia bicicleta identificada y personalizada para que puedan trabajar en el sentido de pertenencia con la guía y acompañamiento de profesionales de la institución. 

El grupo de cicloturistas y amigos está compuesto por Eduardo Herr, Nicolás Soteri, Leticia Martínez y Facundo Sánchez.

"La idea es dar el primer pasito para fomentar y promover la integración de los chicos del Hogar en la comunidad. Buscamos que puedan hacer actividades en las que tengan más roce con la comunidad y puedan compartir lindos momentos", dijo Herr.

"Por eso pedimos a la comunidad que nos done bicicletas que se encuentren en estado de conservación para poder ponerlas en funcionamiento con un mantenimiento básico. También se piden cascos para que los chicos puedan usar las bicis con seguridad", dijo.

A partir de esta iniciativa más de una decena de niños y niñas del Hogar podrán disponer de su propio vehículo para paseos, entrenamientos, actividades recreativas y educativas.

"Estamos muy cerca de cubrir la totalidad de las bicis pero nos falta reparar las que ya conseguimos para ponerlas en manos de los chicos. Cada uno va a elegir de qué color quiere su bicicleta", dijo.

El cicloturismo es una pasión que Eduardo Herr comparte con su familia.

"Nosotros pasamos a buscar la bicicleta donada y allí empieza el proceso de reparación que llevan a cabo los mecánicos Cristian Saldía y Facundo Laplace, quienes nos dan una gran mano", señaló.

Los repuestos se consiguen en dos bicicleterías locales propiedad de las familias Barbera y Mandrini. Allí hay disponibles bonos de colaboración para cubrir este tipo de gastos.

"El proyecto se consolidó hace un mes cuando el Hogar Convivencial aprobó el protocolo por escrito. La segunda etapa prevé la realización de salidas mensuales con los chicos y sumaremos alguna actividad que incluya el enseñarles las normas de tránsito y aspectos de mecánica básica para que ellos puedan tener una relación de cuidado con su bicicleta", añadió el cicloturista.

Los cicloturistas impulsan salidas, encuentros y más actividades ligadas a la bicicleta.

Por su parte, los profesionales de la educación y la contención del Hogar trabajarán en el sentido de pertenencia para que se hagan responsables de su bicicleta y la puedan valorar y mantener por sí mismos.

Eduardo Herr creció en Coronel Pringles, es empleado estatal y su hobbie en los ratos libres siempre fue hacer deportes. Está casado con la docente Flavia Poloni, con quien tiene dos hijas, Camila, de 23 y Carmela, de 10. 

"Desde que dejé de jugar fútbol, hace ya unos 10 años, me dediqué a andar mucho más en bicicleta. Encontré un ambiente muy agradable en el cicloturismo. Me gusta mucho la cultura de mi pueblo y por eso articulo actividades con el área de Turismo para mostrar a la gente sus todos los atractivos que tenemos", señaló.

"Trato de dar una mano en lo que pueda y mostrar desde el cicloturismo incluso la historia escondida del pueblo. También apoyamos a las escuelas rurales haciendo un evento de cicloturismo al año para que cada una de las instituciones pueda tener algún rédito económico", añadió.

Asimismo suelen ayudar a museos locales y transmitir la pasión por la bicicleta a la comunidad.

Herr integra una subcomisión de ciclismo del Club Alumni donde cicloturistas y ciclistas de competición se reúnen con el fin común de difundir y enseñar los aspectos positivos que tiene el uso de la bicicleta y, a la vez, educar a la comunidad ya que es una actividad cada vez más frecuente y es necesario considerar ciertas cuestiones vinculadas al orden y a las reglas de tránsito.

"Tenemos una pista de ciclismo y profesores que dan clases a los chicos. Hacemos una salida grupal los sábados con dos grupos diferentes: uno de entrenamiento y otro de paseo, inclusión y charla", contó.

"La intención es que todo el mundo se suba a la bicicleta, que pruebe, y poder acercar más conocimientos sobre la misma", aseguró.

Herr comparte esta pasión por el ciclismo con su familia. Su hija mayor, Camila, lo ayudó en la organización de algunos cicloturismos y Carmela lo acompaña todos los sábados en las salidas con Alumni.

"Hemos hecho un par de viajes juntos, le apasiona la bicicleta y compartimos hermosos momentos", destacó.

"También hacemos cicloturismos regionales como el clásico en Saavedra que llevamos a cabo cada fin de semana próximo al 7 de noviembre. Este año haremos un Biciencuentro el sábado 4 y un Cicloturismo el domingo 5 desde la Ermita. En lo personal, es un homenaje a mi hermano que vivía allí. Lo recaudado se destina a la cooperadora de la Ermita y a la cooperadora del jardín de Saavedra", dijo.

A partir de este tipo de acciones los cicloturistas de Pringles demuestran, una vez más, que más que un hobbie el cicloturismo es un estilo de vida que promueve tanto la salud y el bienestar personal como las buenas prácticas ambientales. Además, es una buena manera de consolidar lazos, tejer redes de contención y realizar tareas solidarias.

Vías de comunicación (291) 6491243 (Eduardo "Tomate" Herr) 2922422638 (Facundo) o al 22915044829 (Leticia).(lanueva).