¿Qué esperar para la economía post-balotaje?

¿Qué esperar para la economía post-balotaje?

Depende fundamentalmente de cómo se comporte el ministro/candidato.

Los desajustes en la economía, aunque amplificados por el extenso proceso electoral, son reales -faltan dólares, hay déficit fiscal, las importaciones están limitadas y con deudas acumuladas, las Leliq, el crecimiento de la deuda pública, los dólares paralelos tocaron brechas históricas contenidos sólo por la intervención oficial, precios desatados- pero está la posibilidad de que, sea quien sea el próximo presidente, el ajuste que deba realizar no sea tan brutal ni inducido por el mercado.

La clave es que el ministro Massa ejecute la política económica como si ya hubiera sido electo presidente, es decir, con lineamientos de un plan que busque estabilizar las variables económicas y no con medidas parciales que tiendan a profundizar los problemas acumulados.

Haber ganado las elecciones generales lo ubica en una mejor posición respecto a cámaras empresarias y gremios de trabajadores para acordar aumentos de precios y salarios que disminuya la inercia inflacionaria producto de la incertidumbre. Los precios de la mayoría de los bienes y servicios ya ajustaron a dólar blue de $ 1.100.

También le otorga mayor poder de negociación con el FMI.

Podría retomar el ritmo de micro-devaluaciones diarias del tipo de cambio para ajustarlo levemente por encima de la tasa de inflación, es decir, desanclar el precio del dólar de los $ 350 que lo único que genera en este contexto es la percepción de una mayor devaluación en un futuro cercano.

Además, consensuar un sendero de aumentos en los precios de los bienes y servicios regulados, que se encuentran varios puntos por debajo del nivel general, con el objetivo de liberar paulatinamente la inflación reprimida y dar una señal de disminución del gasto público vía subsidios económicos.

Terminar con la política de tipos de cambio diferenciales por plazo determinado para sectores determinados cuyo costo (emisión de más pesos que deben ser esterilizados vía Leliq, aumentando el pasivo del Banco Central) es mayor al beneficio de captar algunas divisas, que tal como viene ocurriendo, se destinan a financiar la salida de capitales, frenar alguna corrida o intervenir en los mercados de bonos y futuros.

Lo mejor para la economía Argentina es que Massa actúe como presidente electo, no como candidato.

La pregunta es si tiene incentivos para hacerlo.

JT Consultora en Economía